Varios tips para aprender a cocinar con la mejor predisposición
El arte de la cocina está lleno de secretos. Aprender técnicas y recetas conlleva dedicación, experimentación y conocimiento. Pero más allá de la dificultad de este arte, cocinar también es un placer, y para muchos un hobbie más que una profesión o una necesidad del día a día. La cocina está muy presente en nuestras vidas, así que aprender a cocinar significa también aprender sobre nuestra alimentación. Aquí ofrecemos algunas claves que, especialmente los cocineros principiantes, han de tener en cuenta.
UN BUEN EQUIPAMIENTO
Invertir en utensilios y demás menaje de cocina es una de las primeras claves del chef amateur. Con el tiempo, ese material se irá renovando y mejorando, porque la práctica exigirá nuevas herramientas. Desde una buena sartén o una tabla de madera hasta un juego de cuchillos. Si no tienes el menaje adecuado, la tarea se hará más difícil y por lo tanto, menos placentera.
ORGANIZACIÓN EN LA COCINA
Esto incluye ingredientes, menaje y limpieza. Es importante despejar el campo sobre el que vayamos a trabajar. Las encimeras despejadas y limpias son siempre más cómodas para trabajar. Además, previamente hay que tener un orden de utensilios y menaje en la cocina para poder encontrar lo que necesitamos rápidamente. También es importante lavarlo bien todo cuando acabamos de cocinar. La grasa y demás suciedad se incrusta y puede acabar dañando nuestros utensilios y electrodomésticos, al igual que nuestra ropa. No olvides utilizar delantales para proteger tu propio vestuario.
LEER DISTINTAS VERSIONES DE LA MISMA RECETA
A no ser que sea una receta muy específica o una recomendación personal, leer distintas versiones resulta siempre enriquecedor. El arte de la cocina tiene mucho espacio para la experimentación y el toque personal, así que la investigación es una parte crucial. Igualmente importante es leer la receta entera antes de empezar a cocinar.
ELEGIR TÚ MISMO LOS INGREDIENTES
Como decíamos al principio, cocinar es una buena manera de conocer mejor nuestra alimentación. Elegir nosotros mismos nuestros productos también es una manera de experimentar. Los alimentos que nos ofrezca un mercado, una huerta, una tienda… son también una fuente de inspiración.