Algunos consejos para dormir mejor

El insomnio es un fenómeno muy común entre los adultos hoy en día. Los médicos recomiendan descansar bien para prevenir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares. Un cerebro descansado es un cerebro menos estresado. A continuación os ofrecemos algunos consejos para dormir mejor.

Haz ejercicio físico

Es un consejo para gozar de una mejor salud en general, pero en esta ocasión está relacionado concretamente con el sueño. Cuando hacemos ejercicio quemamos calorías, mejoramos nuestra resistencia y nos cansamos mucho. Es muy común en nuestra actual forma de vida que nuestro cerebro llegue cansado al final del día por el trabajo, pero cada vez tendemos a una vida más sedentaria. Es importante llegar con ganas de descanso físico a la hora de la cama para dormir profundamente y de un tirón. Sin embargo, no se recomienda hacer ejercicio por la noche, ya que activa nuestro cuerpo. Es más conveniente realizarlo por la mañana o por la tarde.

 

Usa cama y ropa confortables

Una buena cama y una buena almohada marcan la diferencia a la hora de dormir. Un colchón endeble, por ejemplo, afectará a nuestra espalda negativamente, e incluso a nuestra pose y forma de caminar, y por lo tanto a nuestra salud. Para ahorrarnos el dolor de espalda y de cuello, es mejor invertir en una cama donde descansar plenamente. También conviene cambiar el colchón cada diez años aproximadamente. Por otra parte, la ropa de cama y el pijama son igualmente importantes, y también se recomienda renovarlos cada cierto tiempo, ya que su calidad se va desgastando.

 

Optimiza tu habitación para hacerla más cómoda

El entorno que tenemos en el lugar donde dormimos es un importante factor que afecta a nuestro sueño. Esto incluye, entre otros factores, la organización de los muebles, el ruido del exterior, la temperatura y la luz. Eliminar el ruido y la luz exteriores resulta la mejor manera de optimizar la habitación.

 

Toma una ducha relajante

A pesar de que el agua nos puede refrescar y despertar por las mañanas, una ducha poco antes de dormir ayuda también a relajar el cuerpo. Algunos estudios aseguran que una ducha o un baño un rato antes de irnos a la cama, hacen que nos durmamos más rápidamente.