Dentro de la cocina, existen una serie de utensilios y complementos que no pueden faltar. Son imprescindibles para el uso diario de esta estancia de la casa en la que pasamos gran parte de nuestro tiempo. Uno de estos accesorios, son los paños de cocina. Siempre que entramos en la cocina de cualquier casa, veremos colgados o colocados sobre una mesa, algún que otro trapos cocina. Este textil del hogar, se usa continuamente. Están en contacto con alimentos y con superficies húmedas de forma constante. Esto puede provocar que su conservación no sea óptima. Acompáñanos en este post y te enseñaremos los mejores y consejos para que tus trapos de cocina duren más.
¿Cada cuánto se cambian los trapos cocina?
Los trapos de cocina son artículos de hogar que está en contacto con superficies que podrían estar contaminadas. Incluso en muchas ocasiones, tocamos alimentos crudos y luego nos limpiamos en los trapos cocina. Esto puede llegar a ser peligroso, pues podría haber bacterias que podrían infectar la comida.
Algo fundamental para evitar esto, es utilizar diferentes trapos cocina para manipular los alimentos y para limpiar alguna superficie. Por ejemplo, para retirar las migas de los manteles, tendemos a utilizar un trapo. Si lo hacemos, no debemos reutilizarlo para otro uso en la cocina.
Otro aspecto muy importante para conservar los trapos de cocina y evitar cualquier contaminación, es cambiarlos frecuentemente. Según los expertos, es recomendable cambiar los trapos cocina con una frecuencia entre una y dos semanas. De este modo, evitaremos entrar en contacto con numerosas bacterias y microorganismos.
¿Cómo lavar los trapos de cocina?
Para lavar los trapos cocina, mucha gente opta por meterlos en la lavadora con el resto de ropa. Sin embargo, esta práctica no es la más recomendable, pues no se eliminan todas las bacterias. Una opción que ayuda a quitar toda la suciedad de este textil del hogar, es realizando una mezcla que contenga agua y aproximadamente un 10% de lejía y en ella sumergir los trapos. Así conseguirás liberarlos de la mayoría de los microorganismos que puedan aparecer en ellos.
Los trapos cocina, si dejamos que se humedezcan o no se cambian con la frecuencia recomendada, pueden coger mal olor. Para evitarlo, una vez que hayan pasado por la mezcla de agua y lejía y los hayas aclarado bien, puedes introducirlos en la lavadora con un chorrito de vinagre de limpieza. El vinagre actúa como agente neutralizador del olor. Además, también es un suavizante natural. Esta solución también puede aplicarse a otras prendas textiles como las toallas, que también pueden tener tendencia a coger malos olores.
¿Te han resultado útiles nuestros consejos para conservar tus trapos cocina? ¡Cuéntanoslo en los comentarios!