▷ Ideas para guardar mantas y edredones sin ocupar espacio

¿Sabes lo que supone la llegada del verano? Cuando comienza la época estival hay que cambiar la ropa de cama de invierno por otra más fresquita. Las mantas, edredones y colchas se quedan a un lado para dar la bienvenida a las sábanas de verano. Pero, ¿qué hay que hacer con la ropa de cama de invierno? En este post te contamos cómo guardar las mantas y cómo guardar un edredón nórdico de forma perfecta.

¿Cómo guardar colchas y edredones?

Lo primero que se debe hacer al retirar de las camas las colchas y los edredones es lavarlo. En los meses de invierno, se acumulan ácaros y suciedad sobre las colchas y edredones. Si se guardan sin haberlo lavado previamente, lo más seguro es que salgan manchas que no veremos hasta que se vuelvan a sacar con la llegada de los meses de frío. Para lavar las colchas y edredones hay dos opciones: lavarlo en casa o llevarlo a una tintorería. Si eliges lavarlo en casa tienes que tener en cuenta los siguientes trucos: lavarlo con agua fría y jabón suave y utilizar un programa de lavado para ropa delicada. Una vez lavado, ponlo a secar en un tendedero al aire libre pero sin estar directamente expuesto al sol. No tardará prácticamente nada en secarse y es mucho menos nocivo que si se seca en una secadora.

¿Cómo guardar las mantas?

Las mantas son uno de nuestros grandes aliados del invierno. No hay nada más cómodo que tumbarse en el sillón y arroparse con una manta bien calentita. Algunas ideas para guardar mantas son: doblarlas correctamente para que ocupen lo menos posible y guardarlas al vacío. Las mantas se pueden guardar sin problema en la parte alta de los armarios. Los altillos de los armarios suelen ser poco utilizados en el día a día. Se suelen guardar objetos estacionales como mantas y colchas o ropa que no utilizamos. No lo olvides, también hay que lavar las mantas antes de guardarlas para evitar que se estropeen.

¿Cómo hacer que ocupen menos espacio?

Te recomendamos que guardes tus mantas, colchas y edredones en un lugar fresco, limpio y seco. Además, para que ocupen menos espacio a la hora de guardarlo, utiliza bolsas de almacenamiento al vacío. Simplemente hay que colocar las colchas o edredones dentro de la bolsa y con la ayuda de un aspirador hay que retirar el aire hasta que su volumen sea la mitad. Otra opción es utilizar cajas de plástico con tapadera. ¡Pero nunca cajas de cartón! El cartón atrae a insectos, por lo que nuestras colchas se ensuciarían estando guardadas y se pueden estropear.

Otra opción para guardar edredones, colchas y mantas es disponer de un armario destinado únicamente para dichos objetos. En cada balda del armario puedes colocar la ropa de cama de invierno y la ropa de cama de verano. Así, tendrás todo bien organizado en el mismo espacio. 

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