Uno de los mejores momentos al llegar a casa es entrar en tu habitación y tumbarte en tu cama tras un largo día de trabajo. Cuando hablamos del descanso, la calidad de la ropa de hogar y de los muebles que utilizamos para ellos, deben ser la adecuada. En muchas ocasiones relacionamos esto con precios elevados, pero no siempre es así. También puedes encontrar ropa de cama barata sin que tengas que invertir una gran cantidad de dinero en ello. Para conseguirlo, en este post te daremos algunos tips de cómo hacerlo. ¡Sigue leyendo!
Ropa de cama barata en rebajas
Las posibilidades de renovar nuestro hogar e innovar en nuevos estilos puede ser una actividad asequible para todos los bolsillos. Si eres de esas personas que les encanta la decoración, las rebajas son el momento perfecto para darle un aire nuevo a tu hogar y conseguir ropa de cama barata y de gran calidad. Dormir en casa con todo lujo y a buen precio, está al alcance de todos.
Cuando llegan las rebajas, se nos llenan los buzones de descuentos y promociones que quieren atraer nuestra atención. Si queremos ahorrar de verdad, es importante que nos planteemos la siguiente pregunta: ¿realmente lo necesito? Haz un balance de lo que ya tienes en casa. Muchas veces no es necesario invertir el dinero en adquirir ropa de cama barata solo porque sean rebajas, pues la que tenemos nos puede servir un año más.
Las rebajas son el momento ideal para renovar nuestros juegos de sábanas y hacernos con ropa de cama barata, por ejemplo. Con el paso del tiempo, se suelen desgastar por los lavados y el uso diario, perdiendo gradualmente su suavidad. Para sacarle aún más partido a nuestro nuevo juego de sábanas, otro consejo es comprar dos fundas de almohadas distintas. Las fundas de almohadas se desgastan mucho más rápido, por lo que siempre es recomendable tener una de repuesto. Podrás reemplazarla fácilmente si los colores coincidan.
Ropa de cama barata y de calidad
Cuando pensamos en ropa de cama barata, solemos caer en la creencia errónea de que barato no es sinónimo de calidad. Sin embargo, muchas veces ocurre que el precio de este tipo de textiles del hogar se dispara más por su diseño, que por su calidad. Es importante que antes de comprar y decantarnos por un modelo u otro, miremos la etiqueta para ver su composición.
Por ejemplo, un edredón de calidad debe estar relleno de materiales naturales, como la mezcla de plumas y plumón, lana o seda (aunque estos últimos son menos comunes). Su duración en el tiempo es mayor que los rellenos sintéticos (y por ende más caros). No obstante, es fundamental fijarse en el porcentaje de plumón, pues la cantidad determinará su poder aislante.
Podemos decir que ocurre lo mismo con las mantas. Podemos conseguir este tipo de ropa de cama barata y de calidad a un precio no tan excesivo. La lana es un genial aislante térmico y además absorbe muy bien la humedad. El gramaje es otro aspecto fundamental, al igual que la temperatura de la habitación. Un gramaje de 350g/m2 es el ideal, pero también puedes optar por uno de 600g/m2 o hasta de 800g/m2. ¡Será una manta ultra cálida!
¿Qué te han parecido estas ideas para conseguir ropa de cama barata? ¡Te leemos en los comentarios!